El recibidor

Antes de todo definamos lo que es el recibidor:

Nada es más fuerte que las primeras impresiones. No hay ninguna duda de que la primera sensación que las visitas reciban en la entrada a nuestra casa influirá profundamente en la idea que se formarán del resto de las estancias y de las personas que habitan ene ella. Incluso para sus ocupantes, llegar a su casa les será más agradable si el primer lugar que se encuentran es cálido y acogedor. Un recibidor deberá cautivar y estimular a las personas a seguir adelante.

El recibidor debe ser un espacio despejado, sobre todo si no es muy amplio. El secreto para que resulte atractivo consiste en solucionar todos los aspectos prácticos del modo más discreto posible y al mismo tiempo conservar un espacio suficientemente amplio. Es decir, no debemos olvidar el aspecto funcional de nuestro recibidor, puede ser un lugar idóneo para colgar unos cuadros o guardar unos libros. Por eso en los ambientes que se proponen encontramos elementos que además de decorar y dar personalidad al recibidor, no olvidan su función práctica: bancos, estanterías, consolas, etc. Si estamos necesitados de espacio podremos tanto guardar cosas en las estanterías del modelo Siam o en el baúl del ambiente Actia como depositar las llaves o el correo sobre alguna de las consolas de los ambientes Abaca o Zen. Un banco puede resultar muy útil para calzarse o descalzarse al salir o entrar de casa como nos muestran los modelos Lap y Palm Rib. Todo ello acompañado de unos detalles decorativos y uno o varios espejos que ayudarán a ampliar visualmente el espacio darán como resultado recibidores prácticos y acogedores.